Segundo reportaje de la serie: ‘8M, ocho Mujeres inspiradoras’. En esta entrega conoceremos a dos trabajadoras de distintas generaciones
El sábado 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer, una jornada dedicada a reconocer los derechos, logros y avances de las mujeres en diversos ámbitos de la sociedad, así como a visibilizar las desigualdades y luchas que aún enfrentan.
Desde diario Bajo Cinca compartimos 8 pequeñas historias de 8 mujeres inspiradoras de nuestra comarca. En este segundo artículo vamos a hablar de dos mujeres ‘Desde la sencillez, trabajando para grandes firmas‘.
Antonia Sorolla Espitia
Hemos visitado a Antonia en la Residencia Sagrado Corazón de Jesús para que nos cuente su historia.
En su juventud, aprendió corte y confección en Madrid, donde trabajó y vivió durante muchos años. Trabajó con el prestigioso modista Cristóbal Balenciaga, uno de los diseñadores más influyentes del siglo XX, conocido por su enfoque innovador y su capacidad para transformar la silueta femenina. La lista de clientas de la alta sociedad y del mundo del espectáculo de Balenciaga es muy larga: Greta Garbo, Grace Kelly, Ava Gardner, Audrey Hepburn, Jackie Kennedy…
Cristóbal había sido alumno con una tía monja de Antonia en Bilbao. Gracias a ese contacto, esta fragatina viajó a Madrid para aprender y trabajar con uno de los iconos de la moda internacional.
Tras pasar varios años en la capital de España decidió volver a su Fraga natal, porque tenía muchas clientas a las que les hacía todo tipo de vestidos de alta costura. Antonia sonríe y se le ilumina el rostro cuando recuerda sus años de modista, «Ellas me traían la ropa y me decían lo que querían. Yo les diseñaba el traje y lo confeccionaba«.
En nuestra visita a la Residencia Sagrado Corazón de Jesús de Fraga, para conocer la historia de Antonia, nos cuenta que tiene dos hijas: «Una está en América y la otra aquí». Resulta emocionando conocer como esta bajocinqueña ha estado aprendiendo y trabajando junto a Balenciaga, un icono mundial de la moda y como, de forma discreta, acercó la alta costura a la sociedad fragatina, en una época donde solo era accesible para las mujeres de las grandes capitales.
Gloria Martínez
Gloria lleva casi 20 años trabajando en Clínica Dental Fraga, es parte del equipo desde los inicios de este centro. Desde su posición de recepción, junto a su compañera Susana, es el nexo entre los pacientes y todos los especialistas de esta clínica bajocinqueña.
En Clínica Dental Fraga, prácticamente son todo mujeres, solo hay un hombre en el equipo. Tal y como explica Gloria, todas trabajan de forma coordinada, «Desde recepción, pasando por todas las doctoras y especialistas, así como las auxiliares, es todo una cadena«.
Esta forma de trabajar, desde que reciben la primera consulta telefónica, pasando por el acompañamiento y visita con el especialista pertinente, es fundamental para ofrecer el mejor servicio a los pacientes. Sin duda, un ejemplo que destaca y señala la importancia de todas las funciones dentro de una empresa, poniendo en relieve que no hay papel pequeño dentro de un equipo.
