La capital aragonesa reafirma el Recinto Expo como espacio idóneo para citas musicales de gran nivel y finaliza una nueva edición del Vive Latino con buen sabor de boca
Zaragoza volvió a vibrar este fin de semana con la cuarta edición del Vive Latino, que reunió a más de 38.000 asistentes en el Recinto Expo los días 5 y 6 de septiembre. Un año más, el festival demostró que ha encontrado su lugar en la agenda cultural española al consolidarse como un evento dirigido a un público adulto y exigente, que prioriza la calidad musical y la comodidad a la hora de disfrutar de la experiencia.
Con un recinto de más de 80.000 metros cuadrados, perfectamente adaptado para acoger grandes citas, el Vive Latino ofreció un espacio amplio, seguro y sin incidencias destacables. Una organización que la propia dirección ha calificado con un rotundo “Sobresaliente”, destacando la fluidez de accesos, servicios y la buena convivencia entre los miles de asistentes.







El cartel volvió a ser uno de los grandes atractivos, con más de 150 artistas que combinaron nombres consagrados de la escena nacional e internacional como Love of Lesbian, Los Ángeles Azules, Coque Malla junto a Los Ronaldos, La Gusana Ciega, Kase.O, Fangoria, Molotov, Macaco, María José Llergo, Conociendo Rusia o Maldita Vecindad, entre muchos otros. Una programación que supo equilibrar el espíritu rockero y alternativo del festival con propuestas para distintos gustos dentro de un mismo perfil de público.
El impacto económico volvió a ser notable: la organización calcula que el festival ha generado más de 20 millones de euros de retorno económico acumulado en sus cuatro ediciones en Zaragoza. Solo este año, la cita creó más de 1.500 empleos directos e indirectos y elevó la ocupación hotelera al 80 %, con visitantes llegados de toda España —Madrid, Valencia, Pamplona, Logroño o Barcelona— y también de países vecinos como Portugal y Francia.
La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, destacó que el Vive Latino es “un gran éxito no solo organizativo, sino también cultural y de proyección de la imagen de la ciudad”, subrayando su arraigo en la capital aragonesa.
En apenas cuatro años, el Vive Latino Zaragoza se ha consolidado como un referente indiscutible en el calendario musical hispano-iberoamericano, ofreciendo no solo un cartel de altura, sino también un modelo de festival adaptado a un público adulto que busca disfrutar de la música en un entorno cómodo, seguro y de calidad.