La asociación AEGA, entidad a la que pertenecía y ayudó a fundar, ha remitido un sentido comunicado de duelo por uno de los protagonistas más reconocidos de las protestas agrícolas de 2024
El joven David Lafoz, agricultor del Campo de Belchite, ha fallecido según ha comunicado la asociación AEGA (Aragón es Ganadería y Agricultura), entidad de la que era socio y uno de los impulsores de la entidad.
David fue uno de los protagonistas de las protestas agrícolas del 2024 cuando llevó su tractor a la Aljafería. También estuvo ayudando en Valencia, tras la tragedia de la DANA y cuando las inundaciones azotaron su comarca. «…Fue, y será siempre, la imagen viva de la lucha por la supervivencia de un sector que siempre lo recordará como alguien dispuesto a darlo todo por defender el campo«, han escrito desde la asociación agraria.
La asociación AEGA ha remitido una sentida nota de despedida.
NOTA de AEGA:
Hasta siempre David,
Hoy nos levantamos con una triste noticia: la vida nos ha arrebatado a nuestro amigo David.
Con poco más de 15 años, decidió apostar por lo que muchos abandonan: quedarse en su pueblo, trabajar la tierra y luchar por el sector primario, ese que tan a menudo es olvidado y, sin embargo, tan vital para todos.
Hace poco más de un año, acompañado de miles de agricultores, alzaba un grito socorrido a las puertas de la Aljafería con su tractor: ¡Salvemos al campo! Fue, y será siempre, la imagen viva de la lucha por la supervivencia de un sector que siempre lo recordará como alguien dispuesto a darlo todo por defender el campo.
No solo lo dio todo por su tierra, sino también por su gente. Siempre dispuesto a ayudar sin esperar nada a cambio, fue de los primeros en dejar su faena para acudir con su tractor cuando las lluvias arrasaron durante la DANA en Valencia, cuando las inundaciones azotaron su comarca, o cuando cualquier vecino lo necesitó. Él estaba. Siempre.
Con su ejemplo, nos enseñó el verdadero significado del compromiso, la solidaridad y el amor por la tierra. En estos tiempos difíciles para el campo, su figura cobra aún más valor: la de un joven valiente que, en lugar de marcharse, decidió sembrar futuro aquí, con sus manos y con su corazón.
Hoy, el campo está un poco más triste. Pero también más orgulloso de haber contado con alguien como él entre sus filas.
Que la tierra que tanto cultivaste te sea leve, amigo.
Descansa en paz.