Este mes de diciembre ha entrado en vigor el contrato de funcionamiento, mantenimiento y conservación de la depuradora de PLFraga, que ha comenzado a tratar las aguas residuales de los dos complejos industriales
El alcalde de Fraga, Ignacio Gramún, ha visitado esta semana la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de PLFraga, instalación que hace varias semanas también ha comenzado a tratar las aguas del Polígono Fondo de Litera. A la visita también han asistido el ingeniero municipal Jorge Costa, así como Lluís Jordan y Rubén Facerías, representantes de Cassa Aigües i Depuració SL, empresa adjudicataria del contrato de funcionamiento, mantenimiento y conservación de la depuradora. Dicho contrato, adjudicado a la empresa por 328.531,79 euros y formalizado el pasado 2 de diciembre, tendrá una vigencia de dos años ampliable a otros dos adicionales.
Ignacio Gramún ha valorado que “aunque este proyecto haya quedado un poco eclipsado por otras obras de mayor visibilidad urbana, como pueden ser la rehabilitación del San José de Calasanz o la Sala Florida, poner fin a los vertidos del Polígono de Litera ha sido uno de los grandes logros de la legislatura”. Por ello, el primer edil ha subrayado que la entrada en vigor de este contrato cierra un capítulo de “deficiencias estructurales” que afectaban a la sostenibilidad del entorno y a la seguridad jurídica del Ayuntamiento de Fraga.
Gramún ha ensalzado que “ha sido un proceso muy costoso y con el que llevamos trabajando desde el minuto uno de la legislatura, pero finalmente, gracias a la unión entre Ayuntamiento, empresarios y Gobierno de Aragón, podemos celebrar que en dos años hemos resuelto un problema que llevaba treinta años enquistado ycausando problemas para nuestro Consistorio, para nuestra ciudad y para nuestro entorno”.
Para comprender la importancia de la entrada en vigor de este nuevo contrato, es necesario remontarse a la década de 1990, cuando se construyó el Polígono Industrial Fondo de Litera, al carecer este de una estación depuradora. Desde aquel momento, las aguas residuales procedentes de este polígono se han vertido a un desagüe de riego que finalmente desembocaba en el río Segre a través del barranco de la Clamor de Aitona.
Esta situación provocó que, de forma periódica, el Ayuntamiento de Aitona y la Agencia Catalana del Agua elevaran quejas formales instando a la eliminación de las afecciones en el medio natural. Además, desde el año 2007, la Confederación Hidrográfica del Ebro había requerido de manera insistente al Ayuntamiento que dotara de tratamiento a estas aguas, ya fuera mediante una planta propia o a través de la conexión con la infraestructura de PLFraga, un proceso que se vio dilatado durante años por dificultades técnicas y jurídicas en los convenios de colaboración.
Finalmente, el actual equipo de gobierno ha logrado desbloquear la situación mediante la aprobación de una serie de acuerdos estratégicos. En diciembre de 2023, el Ayuntamiento procedió a la firma de dos convenios fundamentales: uno con Suelo y Vivienda de Aragón (SVA) y otro con la EUC de PLFraga. Gracias a estos acuerdos, el Ayuntamiento de Fraga ha asumido la titularidad de la autorización de vertido y la gestión directa de la estación depuradora, un paso esencial para legalizar la situación ante los organismos de cuenca y poner fin a los expedientes sancionadores y a las diligencias informativas que incluso la Fiscalía había llegado a abrir por presunto delito medioambiental.
En términos económicos y técnicos, la solución ha requerido una inversión de casi un millón de euros por parte del Ayuntamiento, destinados a SVA para adquirir los derechos de conexión a la EDAR, una cifra que equivale proporcionalmente al coste de construcción de la parte de la infraestructura que ahora da servicio al Fondo de Litera. Además, se ha conseguido una mejora sustancial en los términos del vertido, incrementando el caudal máximo autorizado en un 33%, lo que permite pasar de los 382 metros cúbicos diarios previstos inicialmente a un total de 514 metros cúbicos. Este margen no solo resuelve el problema actual, sino que garantiza la capacidad necesaria para futuras ampliaciones industriales en la zona.
Como contrapartida y parte fundamental de la negociación con los empresarios locales, el Ayuntamiento de Fraga ha asumido también la gestión integral de diversos servicios de PLFraga, tales como la limpieza de viales, el mantenimiento de zonas verdes y el suministro eléctrico del alumbrado público. Esta era una reivindicación histórica de las empresas instaladas en dicha plataforma que finalmente ha sido atendida para facilitar el uso compartido de la depuradora.
El contrato de funcionamiento, mantenimiento y conservación de la EDAR de PLFraga pone fin a una de las asignaturas pendientes más críticas para la ciudad, cerrando definitivamente un periodo de incertidumbre legal y medioambiental que se ha prolongado durante tres décadas. Con la formalización de este servicio y la conexión efectiva de las aguas del Polígono Fondo de Litera, el Ayuntamiento no solo garantiza el cumplimiento de la normativa vigente y el respeto al entorno natural, sino que también dota a la industria local de una infraestructura sólida y con capacidad de crecimiento, asegurando que el desarrollo económico de Fraga avance de la mano de la sostenibilidad y la responsabilidad institucional.
